Solo Esta Noche

Al filo de nuestra vida, los días comienzan a pasar de una manera distinta... Susurrante en su andar dejando una huella imborrable en nuestros corazones con tal sutileza que resulta sencillo de olvidar, que resulta sencillo de ignorar hasta el punto en el cual logramos ocultar nuestra mas pura esencia, mezclando recuerdos con fantasias, errores con aciertos y amores con desamores... 

Al filo del atardecer nuestra alma nos suplica por un momento de atención, un momento en el que logremos callar nuestras mentes y silenciar nuestros corazones para lograr vibrar en armonía y permitirnos escuchar... Escuchar mas allá del sonido o el pensamiento, escuchar nuestra nuestras vibraciones mas puras, escuchar nuestros verdaderos sentimientos.

Entender que el final de nuestros días puede suceder en cualquier instante, en cualquier momento nuestra luz puede dejar de brillar en la oscuridad del infinito para regresar a formar parte del todo. Lograr comprender que cada noche estamos contemplando el atardecer de nuestra historia, escribiendo las ultimas palabras de nuestra vida con la ilusión y esperanza de un nuevo mañana, con la Fe de otro despertar que nos permita conectarnos con la fuente, con el amor infinito de el Universo para concretar sueños o expander nuestros horizontes, alcanzar nuevas y mas brillantes y lejanas estrellas en el cielo.

Cada vez que cerramos nuestros ojos y nos permitimos escuchar a nuestra alma dejaremos en puntos suspensivos nuestra historia, con la esperanza de un mañana, así como la satisfacción de haber escrito un extraordinario libro de nuestras vidas, una vida que logre transmitir una pequeña chispa de amor, fe en ti mismo y empatía por todos y cada uno de los seres vivientes y vibrantes en este planeta. Con la esperanza de haber logrado conectar nuestros corazones en un espíritu de alegría, amor y calidez forjando lazos indisolubles, lazos que permanecerán fuertes contra el tiempo y la distancia, lazos que han sido forjados desde lo mas profundo de nuestro ser, extendiendo la grandeza de la naturaleza divina que habita dentro de todos y cada uno de nosotros.

Así que si lees estas palabras alimenta tu corazón con bondad y cariño, pues hemos sido bendecidos enormemente por la gracia cósmica, el amor universal.

Su siempre amigo.
Joe Barrera